Hacienda Tucán es el nombre de una finca de olivar ubicada en el centro de Jaén. El nombre de esta proviene de los años 80, época en la que el padre del promotor trajo a la finca diversos animales como un chimpancé y un Tucán para que vivieran en libertad en la misma. La idea de imaginar un chimpancé entre olivos nos pareció algo surrealista y fue el origen de esta colección de aceites de oliva virgen extra loco y desenfadado que, a través del imaginario del mundo del circo, crean un juego perfecto para consumidores que busquen calidad de producto y diferenciación.
Para esto trabajamos una etiqueta envolvente con acabados de glitter que muestra las imágenes en el frontal con ausencia total de la marca para así poder contar con más espacio narrativo. La marca se muestra en la parte trasera con elementos muy cuidados para que el consumidor pueda disfrutar tanto de la etiqueta frontal como de la contra etiqueta.
